Por qué evitar los parabenos

La toxicidad potencial que tienen los productos que consumimos —ya sean alimentos o cosméticos— es un tema que afecta a la salud y que, por tanto, más preocupación genera. Los parabenos, por ejemplo, son sustancias no seguras y que, sin embargo, se emplean en la mayoría de fórmulas cosméticas.

Lo que sabemos de los parabenos

Son moléculas que pertenecen a una familia de alquil-ésteres del ácido para-hidroxibenzoico. Los más empleados son el metilparabeno, el etilparabeno, el propilparabeno, el butilparabeno  y el bencilparabeno .

 Se utilizan como conservantes antimicrobianos en una amplia gama de productos tópicos de uso cosmético, pero también terapéutico. De hecho, un estudio realizado en Suecia demostró que el 80% de las cremas hidratantes contenía este tipo de conservantes. Este uso también es habitual en el sector alimentario por lo que encontramos parabenos en alimentos y bebidas, así como en productos de uso diario como los champús, dentífricos, etc.

Parabenos y cáncer

La presencia de parabenos en cosmética representa un importante riesgo potencial pues se consideran cancerígenos. Interfieren en el equilibrio hormonal del cuerpo, es decir, actúan como disruptores endocrinos, con un comportamiento similar al de los estrógenos. Esta cuestión es especialmente preocupante en el cáncer de mama. Algunos estudios han demostrado la presencia de grandes cantidades de estas moléculas en los tejidos dañados de pacientes diagnosticadas con esta patología. Adicionalmente, los parabenos se han asociado a disminución de la fertilidad, toxicidad orgánica, aumento de la sensibilidad a daños causados por el sol, disfunción del sistema inmunitario y trastornos del desarrollo tanto en fetos como en bebés y niños.

 La exposición a parabenos también se ha relacionado con diversos casos graves de dermatitis alérgica.

Disruptor endocrino
Disruptor endocrino

Las reacciones contra los parabenos

Dinamarca, tras realizar varios estudios científicos, ha sido el primer país en prohibir cuatro tipos de parabenos en productos destinados a menores de tres años. Francia, por otra parte, ha aprobado la llamada Ley Lachaud, que prohíbe el uso de productos con parabenos, ftalatos y aquifenoles (principales disruptores endocrinos).

Las alternativas

Hoy por hoy es posible reducir los riesgos de la exposición a los parabenos pues tanto la industria cosmética como la farmacéutica han regulado las concentraciones permitidas o eliminado, directamente, esta sustancia de sus formulaciones (productos libres de parabenos).

Bibliografía:

– Zhang Z. et al. Inverse antagonist activities of parabens on human oestrogen-related receptor γ (ERRγ):in vitro and in silico studies. Toxicol Appl Pharmacol. 2013 Jul.

– Crinnion WJ. Toxic effects of the easily avoidable phthalates and parabens. Altern Med Rev. 2010 Sep.

– Boberg J. et al. Possible endocrine disrupting effects of parabens and their metabolites. Reprod Toxicol. 2010 Sep.